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19/12/2025 - EL CAMPO TIENE LA PRESIÓN IMPOSITIVA MÁS BAJA DE LOS ÚLTIMOS 7 AÑOS POR LA REDUCCIÓN DE RETENCIONES
Por la baja de retenciones, el campo tiene la menor presión impositiva de los últimos siete años. La Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA) publicó el informe de diciembre que mostró una caída en la carga fiscal. Sin embargo, sigue elevada y el productor solamente recibe el 15,8 % de la ganancia.
La fundación cordobesa mide de manera regular desde 2007 la presión fiscal sobre el campo. El resultado de diciembre arrojó un peso de 56,3 % a nivel país. De cada 100 pesos que recibe el productor, el Estado (en los tres niveles) se queda con $ 56,3.
La presión fiscal está conformada por el 56,5 % de impuestos nacionales no coparticipables (principalmente retenciones), el 37,1 % de impuestos nacionales coparticipables, 5,7 % de impuestos provinciales y 0,7 % impuestos municipales.
“Si se compara el peso de los impuestos no coparticipables (56,5%) con los diciembres de años previos, dado que la baja de DEX tiene efecto en reducir la participación de los impuestos nacionales no coparticipables sobre el total, la ubica en el nivel más bajo desde el comienzo de la medición (año 2007), a excepción de junio 2018”, informó FADA.
De esta manera, la baja de retenciones tuvo un impacto directo. Sin embargo, influyen otros factores como el precio de los granos y los costos.
La mochila de los impuestos
La economista de FADA, Fiorella Savarino, dijo que los productores enfrentan diferentes costos a la hora de trabajar la tierra como las semillas, los fertilizantes, los salarios, fletes, seguros, entre otros. “Una vez que se cosechan, venden ese cultivo, ya sea soja, maíz, trigo o girasol. La plata que les queda después de pagar todos esos costos se divide en tres: el valor de quienes alquilan la tierra para producir 27,9 %, la ganancia 15,8 % y los impuestos que se pagan 56,3 %”, mencionó.
A pesar de la baja, FADA señaló que el peso de los impuestos sigue siendo alto, ya que representan el 56,3 % de la renta agrícola.
Por su parte, la economista de FADA, Antonella Semadeni, explicó que con menos impuestos se va destrabando la rueda y hace que se movilice la economía. La fundación mencionó que aún con esta baja, más de la mitad de lo que genera una hectárea agrícola se destina al pago de impuestos.
Al mirar por provincia, el informe mencionó que Córdoba registra una carga fiscal de 54,3%, Buenos Aires 54,5%, Santa Fe 53,5%, La Pampa 53,6%, Entre Ríos 60,3% y San Luis 51,4%.
“En todas las provincias analizadas se paga impuesto inmobiliario rural e impuesto a los sellos para la compraventa de granos. En Buenos Aires, Entre Ríos, La Pampa y San Luis se pagan Ingresos Brutos con diferentes porcentajes. En Córdoba y Santa Fe la actividad está exenta. Buenos Aires y Santa Fe tienen tasas municipales, mientras que La Pampa tiene las guías cerealeras. Córdoba, San Luis y Entre Ríos no tienen imposiciones a nivel local. San Luis y La Pampa tienen impuestos al estilo de aduanas internas”, describió el documento de la fundación.
Desafíos para 2026
Los economistas de FADA plantearon que el escenario productivo para la campaña 2025/26 es favorable. “Se espera una mejora cercana al 18 % en la producción total de soja, maíz, trigo y girasol, lo que equivale a 16 millones de toneladas adicionales frente a la campaña 2024/25”, resaltó el documento.
Para los precios, las proyecciones indican un escenario neutral, con valores similares a los actuales. “Se espera una buena campaña en términos productivos, con más toneladas, aunque sin mejoras significativas en los precios”, concluyó FADA.
Fuente: Agrofy News
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